Capítulo 227: La melancolía del vampiro
reencarnado.
Tu
alma no encajaba en ese mundo.
Tras
escuchar esas palabras, renací en este otro mundo como Argento Vampear, una
hermosa chica vampiro.
Al
principio buscaba alguien dispuesto a darme de comer tres veces al día y
dejarme dormir cuando quisiera. Pensé que dormir era todo lo que necesitaba
pero, por alguna razón, estoy ahora aquí.
–…
¿Esa es la capital del Imperio?
Miré arriba y me encontré con un extraño espectáculo. Las altas murallas que rodeaban la capital eran muy distintas a las de estilo medieval, hechas con piedra, que he visto hasta ahora. Sus paredes son claramente de acero y tienen alguna especie de mecanismo integrado, lo que da la impresión de que hemos llegado a un mundo de ciencia ficción, en lugar de estar en una fantasía medieval.