sábado, 9 de mayo de 2020

Tensei Kyuuketsukisan wa Ohirune ga Shitai Capítulo 168

Capítulo 168: Reunión a media noche.

—Ya veo, con “movimiento de sombras” pudiste llegar aquí desde el continente demoniaco.

—Sí, tras colocar mi propia sombra en un determinado punto, puedo volver ahí en cualquier momento… Aunque no es más que simple transferencia mágica, ya que no puedo moverme a un lugar en el que haya estado antes a menos que lo marque. Esta tienda me es familiar desde hace mucho tiempo, suelo venir aquí después del trabajo.


Tras una breve explicación, Mutsuki-kun bebió de su taza. Me preguntaba cómo pudo venir cuando el continente demoniaco está bastante alejado. Parece ser que es debido a los efectos de su habilidad.

Por su explicación, aparentemente, él no puede usar su habilidad a menos que marque un lugar en el que haya estado, como un warp en un RPG.

 —Si uso esto puedo traer a tus amigos… pero tengo que memorizar sus sombras primero… Es problemático, tú sabes, entender sus esencias.

—En pocas palabras, pasará un buen rato antes de que ellos puedan conseguir un pase ¿o algo así?

—Exacto, ¿Qué tal si se quedan aquí un tiempo? Bajo sus circunstancias ¿No sería mejor tener más poder? puedo traerlos si gustas esperarme.

Mutsuki-san entendió nuestra situación luego de explicársela y, aun si dijo “eso es problemático”, siguió estando dispuesto a cooperar. Al igual que antes, él es alguien amable.

Por supuesto que me gustaría ver, si es posible, a Felnote-san. Además, Kuzuha-chan y Neguseo también vienen para acá.  Así que le sugerí a Aoba-san que nos quedáramos por un tiempo.

—Por eso… me gustaría quedarme aquí por unos días ¿Está bien?

—Sí, sería de ayuda incrementar el número de personas que nos acompañan.

Aoba-san dio su aprobación, por lo que nos quedaremos en la República.

Tras finalizar la charla empecé a comer el pastel de queso que Satsuki-chan nos trajo y su dulzura y suavidad se extendió en mi boca. Dado a que ella se fue a la parte trasera con Kuro-san, lamenté no poder decirle directamente lo delicioso que era. Los pasteles de esta tienda son muy ricos.

—Fufu…

—…¿? ¿Qué pasa Aoba?

—Nada, parece ser que tus gustos por la comida no han cambiado.

—Oh… podría ser así.

Siempre me han gustado los pasteles de queso. Parece ser que Aoba-san sonreía debido a que se acordó de los viejos días. No hay nadie en este mundo con quien pueda compartir esos recuerdos, dado a que ni siquiera he cumplido un año desde que reencarné.

Mientras me sentía algo nostálgica, le di otra mordida al pastel de Satsuki.

—Pero debo decir que este pastel es realmente delicioso, quien lo hizo comprende bien los sabores de los ingredientes y crea un balance óptimo. Me gusta y sabe bien.

—Es bueno, lo recomiendo.

—Los pasteles de aquí son deliciosos… los he estado comiendo por mucho tiempo, es sorprendente como no me he cansado de ellos tras comerlos por tantos años.

Añadió Mutsuki-san mientras le daba otra mordida a su pastel. Él y Satsuki-san parecen ser viejos conocidos y, dado a que ambos son de una raza longeva, podrían estarse hablando desde hace cientos de años.

—Por cierto… Mutsuki-kun ¿Con esto está bien?

—Hmmm ¿Qué pasa Isabella?

— ¡No me digas “¿Qué pasa?” cuando sabes a lo que me refiero!

Mutsuki-san le dio una respuesta vaga a Isabella-san, que había estado en silencio hasta ahora. Lo que ella quiere decir puede ser entendido no solo por Mutsuki-san sino también por todos los presentes, que es “Quiero cambiarme de ropa”.

Ella no está usando su vestimenta habitual, sino un vestido con volantes. Siendo concretos, el vestido es similar al uniforme de maid que se usa para trabajar en esta cafetería. No expone mucho, pero es muy lindo. Al traerlo puesto, además de que la hace destacar más que cuando usa su traje habitual, hace que tiemble avergonzada con su rostro teñido de rojo.

—… ¿Por qué tengo que hacer esto?

Originalmente fue Satsuki-san quien intentó ponérselo a Isabella-san, pero incluso si ella intentó negarse tuvo que obedecer cuando Mutsuki-kun dio su aprobación luego de decir “Deberías usarlo, te verás bien, no, te verás genial al ponértelo”. Como resultado, Isabella-san está muy avergonzada e inestable a los cumplidos de Mutsuki-san.

—Bueno, ¿No está bien siempre y cuando te veas bien?

—Piensa en mi edad por favor, ¡Es irrazonable! En primer lugar… mi brazo.

—En cuanto a tu brazo, estás usando guantes largos que pueden cubrirlo, por lo que las personas no pueden verlo. Además, incluso si ya eres hermosa, pienso que te ves genial con esas lindas ropas

— ¿¡Lindas!?

Escuchando como Mutsuki-san la llamó linda, las mejillas de Isabella se volvieron incluso más rojas.

—Te preocupas mucho por tu brazo cuando hay muchos otros lugares que mirar, como tu hermosa cara o linda personalidad, pienso que deberías arreglarte más, verte vestida así me hace feliz… ¡Eso duele! ¿Dije que duele, no? ¡Deja de golpearme!

Mutsuki-san se fue de la mesa a toda prisa mientras la avergonzada Isabella-san seguía golpeándole. Aoba-san suspiró viendo a esos dos.

—Ustedes dos están enamorados ¿No es así?

— ¡Imposible!

No, ni siquiera a mí me parece que sean solo amigos. Incluso con lo insensible que soy puedo entender que Isabella-san y Mutsuki-san son pareja, no amigos, y tienen una relación entre hombre y mujer.

De hecho, incluso mientras Isabella-san regaña a Mutsuki-kun, sus mejillas seguían ruborizadas y su boca temblaba. Debe estar alegre porque su amado le haya hecho un cumplido.

Sus golpes suenan pesados, pero ella no puede ocultar sus sentimientos así.

— ¡Me cambiaré! ¡Ya estoy harta!

Isabella-san intentó mostrarse intimidatoria mientras decía eso e iba a la parte trasera de la tienda. Luego de verla con satisfacción, Mutsuki-san giró su rostro hacia nosotras.

—Primero que nada, entiendo sus circunstancias a grandes rasgos. Déjame el problema de tus amigos a mí, los traeré lo más pronto posible.

—Gracias Mutsuki-san,

—No te preocupes por eso, o más bien, estoy agradecido de que hayas protegido no solo a Richelle-san sino también el territorio de los elfos oscuros. Pienso que es bueno que hayas cuidado de ellos, incluso si yo tengo una larga relación con ellos no pude ir a ayudarlos a tiempo, tan solo piensa en esto como una manera de regresarte el favor.

Él mostró su gratitud y parece ser que no le importó inclinar su cabeza a mí para luego mostrarme una sonrisa en la que supe que podía confiar, como lo hizo casualmente lo acepté sin ningún remordimiento.

—Como siempre, Mutsuki-san es del tipo que carga todo en su espalda.

—Oh… Iris, no puedo evitarlo, así soy yo.

—Sí, como siempre…

La vampiresa dorada que abrazó a Mutsuki-san desde atrás mientras se recargaba en su hombro es Iris Ichinose, compañera de Satsuki, otra vampiresa encargada de la cafetería mayo. Ella no puede salir mientras el sol esté fuera, por lo que solo puede moverse con libertad cuando se hace de noche, como ahora, y parece ser que escuchó en secreto nuestra conversación.

—Eso es algo bueno de ti Mutsuki, aunque también algo malo.

— ¿Verdad? Así es como Mutsuki es.

—Satsuki… Fumitsuki ¿También vinieron?

—Sí-+ Arge vino, por lo que quería salu… Ha sido un buen tiempo Arge, por favor disfruta tu estadía.

—Ah, sí, tiempo sin vernos.

Ante mi respuesta, ella me dio una sonrisa. Fumitsuki-san, al igual que Kuro-san, es una de las meseras de la cafetería mayo. Ella tiene su cabello negro y mechón blanco.

—Oh ¿Qué pasó con Isabella? Pensé que había ido a la parte de atrás.

—Sollozaba mientras decía “Me cambiaré de ropa” por lo que la dejé en un cuarto destinado para eso.

—Bueno, entonces, cuando ella regrese ¿Podrías darme un pastel para llevar?

—Incluso tú eres adicto a este. Fumitsuki-chan, por favor.

—Sí, sí, gracias por tu patrocinio. Entonces, Mutsuki-kun, te veo luego, necesito saludar a nuestros otros clientes.

Mutsuki-san dijo conocer esta tienda desde hace mucho tiempo, y pensar que también conocía a Iris. Aunque el comportamiento de las personas en la tienda de algún modo es bastante suelto, él respondió como si fuera lo normal.

Tras terminar de hablar, Iris-san soltó el cuello de Mutsuki-san y sus pies tocaron suelo. Tiene una linda sonrisa, como la de una niña traviesa.

—Arge, tiempo sin vernos.

—Sí, tiempo sin vernos Iris-san.

—Parece ser que trajiste a una amiga que no había visto antes… Um… ya veo, ella no parece ser una mala persona. Encantada de conocerte, soy Iris Ichinose.

—Mi nombre es Aoba, encantada de conocerte.

Mientras Aoba-san e Iris se saludaban, yo le hablé a Satsuki.

—Satsuki-san, disculpa, ¿podemos hablar?

—Sí ¿Qué pasa?

—Hay algo que quiero preguntarte más tarde así que…

—Está bien, te escucharé luego. Por cierto, ya es algo noche, ustedes dos necesitan un lugar donde quedarse. Les prepararé una habitación.

—Lo siento y por favor.

— ¡No tienes que disculparte! Hay varios cuartos disponibles.


Con la misma emoción de siempre, lo que me hizo sentir nostálgica, Satsuki-san nos aceptó fácilmente, por lo que incliné mi cabeza a ella agradecida.


1 comentario:

  1. Excelente historia cada vez se pone más interesante. Muchas gracias por traernos este contenido, debo decir que haces unas traducción de calidad has hecho un buen trabajo te felicito!!

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